Las mentiras sobran, no debieran realizarse... ni pequeñas ni grandes: https://www.todamujeresbella.com/8561/mentiras-pequenas-grandes/
“Ante todo, no te mientas a ti mismo.
Aquel que se miente a sí mismo
y escucha sus propias mentiras
acaba siendo incapaz
de distinguir la verdad,
y consecuentemente,
deja de respetarse y ser respetado.
Y careciendo de respeto, deja de amar.”
Fyodor Dostoyevsky
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Las mentiras no traen más que problemas.
Hay quienes tienen la costumbre
de mentir siempre, una y otra vez...
Ya no son capaces de distinguir
si lo que dicen es creíble o no,
si tiene sentido o no,
y peor aun... llegan al punto
en el que se creen sus propias mentiras.
La costumbre de mentir es fea,
pero lo patético es...
cuando te das cuenta de que
la persona que más miente
es la que más se cree
lo que ella misma dice.
Quien miente a los demás
se miente también a sí mismo,
acaba viviendo en una realidad paralela,
una fantasía que muchas veces
es notablemente falsa, pero que nada se le dice.
Y al hacer esto, al recurrir siempre al engaño,
a la falsedad, la burla y el embauque,
la persona que miente se degrada,
se falta el respeto a sí misma,
y provoca que los demás
ya le vean como lo que es,
una persona mentirosa,
no digna del respeto.
Y tristemente, tanta mentira,
también lleva a la incapacidad de amar,
porque todo se centra en si misma,
en hacer creer a los demás
lo que su mente enferma desea que crean.
Mentir es perjudicarse a uno mismo,
no lo hagas, mejor es ir con la verdad por delante.