Con lo bien que estaría yo pasando más tiempo sobre mi querida cama... y nada, todos los días lo mismo, hay que despertar.
Mi cama y yo somos perfectos el uno para el otro,
pero mi despertador sigue intentando separarnos.
--
Si por mí fuese,
me quedaría en la cama,
al menos un rato más cada día,
descansaría un poco más,
me renovaría algo más.
Necesito poder dormir,
pasar tiempo junto a
mi queridísima cama,
mi muy apreciada cama,
pero nada... cada mañana
es más de lo mismo,
suena el despertador,
se dispara la alarma,
y tengo que levantarme
que la vida continúa
y no puedo quedarme a dormir.